SALUD PODAL
En este trabajo se busca establecer una relación entre los diferentes tipos de camas que nos encontramos en las granjas gallegas y la salud podal de los animales. Para establecer esta relación utilizamos los datos recopilados por el Servicio de Podología de Seragro SCG desde el 1 de enero de 2017 hasta el 31 de diciembre de 2018.
Como resultado de este trabajo somos capaces de analizar los datos de 131 explotaciones repartidas por toda la comunidad, sumando entre todas 23.434 vacas y un total de 53.022 registros. Cada nota registra la pasada de un animal por el potro, indistintamente si se trata de una visita del técnico podólogo marcada periódicamente para el recorte funcional o bien de una visita de urgencia para atender a uno o varios animales cojos. Como dato relevante a la hora de analizar las incidencias debemos destacar que de los 53.022 registros solo un 27,66 % fue recogido en urgencias.
José María García Nieto Servicio de Podología de Seragro SCG
DATOS GENERALES
Antes de comenzar a agrupar los datos por tipo de cama, lo que dará lugar a nuestro análisis, debemos conocer cuál es el volumen de incidencias y de vacas cojas y qué patologías son las más frecuentes en el volumen total de datos, de tal manera que tengamos unos valores de referencia medios.Durante los dos años analizados se registraron un total de 25.009 incidencias en 18.846 cojas; el hecho de que existan más incidencias que vacas es debido a que cada animal puede presentar hasta ocho patologías cada vez que pasa por el potro, una por cada pezuña. Dada esta información podemos afirmar que el conjunto de los datos presenta un 47,17 % de incidencias en un 35,54 % de vacas cojas.
Dentro de ese 47,17 % de incidencias registramos diferentes patologías. Las tres más importantes o frecuentes son la úlcera, con un 36 %, la separación o enfermedad de línea blanca, con un 25 %, y la dermatitis, con un 19 %, sumando la dermatitis digital y la interdigital. En posiciones menos frecuentes, pero no por eso menos relevantes, encontraremos la suela fina (5 %), la hemorragia localizada (5 %) y el flemón interdigital (2 %).
PATOLOGÍAS MÁS FRECUENTES
Antes de entrar en la materia objeto de análisis, debemos comprender la naturaleza de cada una de las patologías, para ver más claramente cómo el tipo de cama les puede o no afectar.
En primer lugar hablaremos de las patologías de carácter infeccioso, ya que podemos decir que su incidencia viene en menor medida marcada por el tipo de cama y están más ligadas a rutinas de limpieza y pediluvios, a diferencia de las lesiones de suela, más relacionadas con el descanso y con un correcto manejo de los espacios del establo. Dentro de estas patologías de origen infeccioso destacamos la dermatitis digital e interdigital, las terceras en relevancia como comentamos en el párrafo anterior, y también el flemón interdigital.
En cuanto a las patologías como úlcera, separación/línea blanca, desgaste y hemorragia localizada, sí encontramos una relación directa con el tipo de cama y el manejo del descanso de los animales, como veremos más adelante.
“EL DESGASTE O LA LESIÓN Y SUELA FINA ES LA ÚNICA DE LAS PATOLOGÍAS ANALIZADAS QUE SÍ TIENE MAYOR PRESENCIA EN EL SUBGRUPO DE CAMAS CON RELLENO DE ARENA”
La úlcera más común es la úlcera de suela y puede ser provocada tanto por exceso como por defecto de casco, tiempos de espera largos en los ordeños y sobrepoblación en el establo, tanto en trabadiza como en camas; básicamente responde a una falta de descanso.
La enfermedad de línea blanca se inicia en el borde de la pezuña y le afecta normalmente a una amplia zona del casco, pudiendo provocar separaciones y úlceras de pared si no es correctamente
atendida en tiempo y forma. Por otra parte, la separación de suela puede aparecer la causa de cualquier objeto que perfore el casco o bien por grietas (por consecuencia, al igual que la úlcera, de un exceso o defecto de casco).
Estrechamente relacionada con la separación está la suela fina, que se da en pezuñas que presentan un grosor inferior a los 5,5 o 6 mm, lo que hace que el casco no sea capaz de soportar el peso del animal, pudiendo, incluso, llegar al desgaste total. Esta patología es más frecuente en suelos abrasivos, rutinas con largos desplazamientos de los animales o tiempos de espera elevados, y también por materiales de cama que dan lugar a un efecto lija entre la pezuña y el suelo de hormigón, como puede ser el caso de las camas de arena o mezclas de carbonato y serrín con alto contenido en carbonato.
Por último, la hemorragia localizada es también una lesión de suela que, de la misma manera que las anteriores, se produce en situaciones de exceso de casco o también en suela fina, en conjunto con un descanso deficiente. En muchos casos, si no es tratada a tiempo, la hemorragia localizada puede ser la antesala de una úlcera de suela.
ARTICULO COMPLETO CAMAS Y SALUD PODAL