IMPORTANCIA DE LA NUTRICIÓN EN LA REPRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
Muchos de los problemas reproductivos que hoy se presentan en los rebaños lecheros es consecuencia del mejoramiento genético logrado en los últimos años. Cuando los animales eran de bajo nivel productivo (3.0004.000 lts/lactancia) bastaba con la pradera, que con una adecuada disponibilidad de materia seca alcanzaba a cubrir los requerimientos nutritivos de los animales. Sin embargo, en los últimos 30 años los animales fueron en muchos casos sacados de las praderas, confinados a establos y sometidos a un estrés medio ambiental y nutricional. Muchas vacas lecheras reciben altas cantidades de alimento, pero en muchos casos, se ha descuidado la relación forraje concentrado.
Sergio Hazard T. Ing. Agrónomo M.Sc. INIA Carillanca
Una buena alimentación de las vacas nos permitirá obtener por una parte el potencial genético que la vaca trae como herencia de sus padres y por otro lado que los animales desarrollen sus procesos reproductivos. La idea es que cada año la vaca tenga una cría y como consecuencia de ello una lactancia por año.
LA ENERGÍA DESDE EL PUNTO DE VISTA PRODUCTIVO Y REPRODUCTIVO.
Los animales utilizan la mayor parte de los nutrientes contenidos en los alimentos para una serie de funciones: mantenimiento, producción de leche, carne, huevos, lana, otros.
El contenido energético de los alimentos se puede expresar en diferentes unidades. En Chile, las necesidades energéticas de los animales se calculan en base a energía metabolizable.
En vacas de alta producción el factor más limitante es la energía, y esto se agrava en la medida que los forrajes que consumen tengan una baja digestibilidad. Prolongados estrés alimenticios y que acarreen serias pérdidas de condición corporal afectan seriamente la actividad reproductiva de las vacas lecheras.
Desde el punto de vista reproductivo aquellas vacas que presentan una mayor producción de leche tienen una tasa de concepción más baja respecto a animales de menor producción. En otras palabras, a las vacas de alto nivel productivo les cuesta más quedar preñadas. Esta declinación en el aspecto reproductivo es consecuencia del mejoramiento de la producción de leche por animal y de la alta demanda de nutrientes que ello implica.
Mantener un balance energético adecuado al comienzo de la lactancia es extremadamente difícil, especialmente si no se dispone de un forraje de buena calidad. En esos momentos la actividad metabólica del animal está dirigida a producir la mayor cantidad de leche de acuerdo a su potencial productivo.
La mayoría de las vacas alcanzan su potencial de leche entre los días 45-60 días de iniciada la lactancia. Sin embargo, el consumo se encuentra desfasado respecto a esta mayor producción y recién se logra entre 70-85 días. Esto hace que se produzca el balance negativo y se afecte, no solamente la producción de leche, sino que el animal no ovula y por lo tanto no puede quedar preñado.
La ocurrencia de la primera ovulación post parto determina en gran parte cuan pronto la vaca podrá quedar preñada y esto está directamente relacionado a la condición corporal al parto y el consumo de energía. Por lo tanto es absolutamente necesario de que el animal llegue al parto con una condición corporal de 3,5-4,0, que en términos prácticos significa ni gorda ni flaca.
En el Cuadro 1 se muestra los datos de una experiencia realizada en la cual los investigadores pusieron las vacas en 3 grupos. En el Grupo 1 colocaron todas las vacas que tuvieron su primera ovulación post parto entre los días 9- 14; el Grupo 2 la tuvo entre 15-20 días y el Grupo 3 entre los días 21-34. Se registró la producción que presentaron las vacas durante los primeros 42 días de lactancia. Se observa que las vacas de menor nivel productivo presentaron
ARTICULO COMPLETO IMPORTANCIA DE LA NUTRICIoN EN LA REPRODUCCION DE LAS VACAS LECHERAS