REPRODUCCIÓN EN NOVILLAS. REVISION
INTRODUCCION.
La regulación de la pubertad tiene un origen central, donde el eje hipotálamo hipófisis gonadal, juega un papel fundamental, aunque aún no están bien esclarecidos (Apter, 1997). Sin embargo la regulación de esta etapa
Araujo1, Guerra Álvaro. M.V.Z.; MSc. 1. Escuela de Ciencias Agrícolas, Pecuarias y del Medio Ambiente. Programa de Zootecnia. Universidad NacionalAbierta y a Distancia. Cead Valledupar, Cesar; Colombia
Resumen
Se proporciona conocimiento sobre la regulación endocrina y reproducción de la pubertad en novillas, , haciendo énfasis sobre el comienzo de la misma en donde se plasman los elementos relevantes para comprender los aspectos neuroendocrinos reguladores y se enfatiza en los mecanismos fisiológicos que explica el complejo proceso que involucra los diferentes eventos de pulsos de las Gonadotropinas a nivel del Hipotálamo, dando inicio a la secuencias de fases neurohormonales que posibilitan la aparición de la actividad ovárica y conducta sexual sobre todo en condiciones tropicales y subtropicales de nuestra región. parece depender de la activación del impulso exitatorio funcionalmente conectado a la red neuronal de GnRH, secretada por el hipotálamo para regular las gonadotropinas (Niswender, 2002.).
El hipotálamo controla la nivelación de las gonadotropinas de la hipófisis anterior mediante la acción de sustancias específicas liberadoras e inhibidoras (Pardo. 2004). Estas son secretadas por las neuronas hipotalámicas y transportados desde la eminencia media del hipotálamo hasta la hipófisis por el sistema portal hipotálamo hipofisario (Arthur et al; 1991). En 1971 se determinó que la estructura molecular de la hormona liberadora de gonadotropina (GnRH) es un decapeptido que luego fue sintetizada.
No está suficientemente claro si la GnRH es responsable de la liberación in vivo tanto de la LH como de la FSH (Cechini, 1995).
El comienzo de la pubertad se asocia con un incremento de la frecuencia pulsátil de la secreción tónicas de gonadotropinas y los esteroides gonadales.( Obregon et. al; 2012). La liberación tónica de la LH, no ocurre de una forma constante, sino de una forma pulsátil en respuesta a una liberación similar de GnRH del hipotálamo. Existe también una descarga conjunta de FSH, haciendo parte del complejo hormonal. La progesterona y el estrógeno reducen la frecuencia y amplitud de los pulsos de la liberación de gonadotropinas (Arthur et. al; 1991).
El En el periodo prepuberal se suceden dos incrementos en los niveles de LH. (Padilla, E. 1978). El primero de ellos ocurre entre los noventa y cincuenta días (Adams, et. al; 1996), seguido de un descenso en la concentración y un subsecuente incremento con la pubertad (primera ovulación) entre los doscientos cuarenta y trescientos sesenta y cinco días (Adams et al; 1994). Al parecer la amplitud y el incremento de estos pulsos es crucial en el mecanismo disparador de la primera ovulación (Kínder et. al; 1987). Once a nueve días antes de la ocurrencia de esta ovulación, se presenta una elevación de la LH y luego otro durante el estro, aproximadamente de la misma magnitud. El primer pico es preparatorio y el segundo necesario para la ovulación (Gonzales Padilla et. al; 1975a). El tiempo de la primera ovulación coincide con la frecuencia de secreción de LH de un episodio.
En resumen, antes de la pubertad el eje hipotálamo-hipófisis es extremadamente sensible a la inhibición de los esteroides gonadales, resultado de una disminución de la secreción de LH y FSH (Jensen, 1987), y cuando llega a la pubertad disminuye la acción inhibitoria de los esteroides, lo que determina un incremento de la secreción de gonadotropinas suficiente para iniciar la actividad reproductiva (Reiter,1973)
Los niveles de FSH en novillas son más constantes, aunque también ocurren algunas fluctuaciones (Echeverria,2004). Los niveles de FSH tienden a incrementarse en forma paralela con la caída de los de LH, pero con menos extensión durante la fase prepuberal. Estos pueden ser el resultado de la liberación y síntesis simultanea por las células de la pituitaria (Moran et al, 1989).
Se ha establecido que la concentraciones de LH y FSH se incrementan a los siete meses de edad (Knobil, et al, 1983); de ahí en adelante son altas en sangre durante un periodo mínimo de secreción. Esto es interesante para ver la disminución en los niveles de LH y FSH en pituitaria, que preceden a la primera ola ovulatoria (Evans, et al.1994)
Otras hormonas importantes en la regulación endocrina de la pubertad son la progesterona y el 17 B estradiol. Los niveles de estas hormonas se mantienen bajos y constantes en relación con los patrones observados en el animal adulto, hasta cuando se aproxima la primera ovulación (Day et al; 1984).
La ovulación es precedida de cortas elevaciones de niveles de progesterona (Drion et al, 1996) la que pasa de 0,3 a 1ng/ ml (Gonzales-Padilla, et al; 1975a). La elevación transitoria de progesterona esta siempre precedida de una oleada ovulatoria preparatoria de LH. El primer aumento preovulatorio de LH ocurre solamente después de que la elevación prepuberal de progesterona desciende a su nivel basal (Gonzales-Padilla, et al, 1975a).
ARTICULO COMPLETO ENDOCRINOLOGIA Y REPRODUCCION EN NOVILLAS. REVISION