LAMINITIS
DMVZ PhD Hans Schroeder W.
INTRODUCCIÓN
Este trastorno podal de los bovinos, especialmente de los de especialización lechera, se denomina también laminitis, podofilitis difusa aséptica y en algunas ocasiones infosura, aunque este último término hace referencia más bien a los equinos. La laminitis es una alteración microvascular de la lámina o podófilo, tejido muy vascularizado y generador de queratocitos, que se localiza entre la tercera falange y el estuche córneo de la pezuña.
La podofilitis tiene un origen multifactorial, aunque en la actualidad se la considera como un trastorno parametabólicodigestivo; también la hemos observado como secuela de endometritis y mastitis tóxicas con directa liberación de histamina, la cual afecta notoriamente la vascularización del corion laminar con ruptura de las arteriolas y la consiguiente edematización del corion, lo cual engendra profundo dolor al apoyar el dígito afectado, además de alterar la regeneración de queratocitos, por lo cual se verá la tapa o muralla de la pezuña con surcos horizontales más que verticales. La irregularidad en la formación de tejido queratogénico tiende a deformar la punta de la pezuña (zapato de payaso) y debilitamiento de la suela del estuche córneo con la formación de hemorragias y úlceras que se abren, permitiendo la entrada de gérmenes, los cuales infectarán el podófilo desarrollándose así una pododermatitis (podofilitis, laminitis) séptica.
Las citadas manifestaciones clínicas son muy frecuentes en los hatos lecheros, no sólo del altiplano Cundiboyacense, sino también en aquellos de clima medio y caliente de Colombia, mientras que por el momento este trastorno es poco frecuente en los conglomerados conformados por ganado índico u otras razas taurinas que pastorean en grandes extensiones; el tipo de alimentación y dureza de la pezuña impiden la aparición en ellos, del mencionado problema. En otros países en donde la ganadería de carne es básicamente de origen taurino y la cual es alimentada con grandes cantidades de concentrado y subproductos de cereales y molinería, tiende a verse con más frecuencia esta anomalía.
La laminitis aséptica, como otras afecciones podales, ofrece serias implicaciones sobre la salud del animal afectado y por ende en su rentabilidad. La inflamación crónica del corion implica mala condición corporal (rehusarse el animal a pararse para comer) lo cual induce anestro patológico, alteraciones del ciclo estral, dificultades en quedar preñada (más días abiertos). En nuestro ejercicio privado de la práctica bovina hemos observado que sí el proceso se hace crónico tiene secuelas sobre la fisiología del parto y la aparición de frecuentes casos de retención placentaria, los cuales a su vez originan por si solos severa endometritis aguda puerperal (loquiómetra), que puede llegar a ser tóxica para el corion digital.
La podofilitis se observa más en animales adultos, aunque la hemos observado en terneras y vaquillas alimentadas con dietas suplementarias ricas en almidones. Vale anotar aquí, que no es raro que pueda coexistir un aumento de casos de laminitis, sean agudas, subclínicas o crónicas en hatos infectados por Diarrea Viral Bovina. Igualmente existe estrecha relación entre mastitis posparto causada por E. coli, lo cual favorece la liberación de histamina, afectando la vascularización del corion del dígito (aumento del flujo sanguíneo laminar, rupturas de arteriolas y edema corial). Hasta el momento actual la etiología y desarrollo de la laminitis son poco claras. Su curso clínico puede ser agudo y de aparición esporádica y de manifestación evidente, mientras que la forma subclínica (para algunos llamada crónica) es la más frecuente de las cojeras que afectan el ganado lechero. En la actualidad se acepta que la aparición de casos de pododermatitis difusa aséptica tiene base nutricional, aunque la podemos encontrar asociada a mastitis y/o endometritis aguda puerperal; también puede encontrarse por causas traumáticas. Es importante anotar que la cantidad y calidad de la alimentación suplementaria influye sobre la fermentación ruminal; estos productos resultantes de la fermentación pueden llegar a ser tóxicos para el corion digital al ser absorbidos por la circulación sanguínea y linfática. Dependiendo del grado de los agentes tóxicos, el podófilo puede verse afectado por pequeñas hemorragias y edema, complicándose con úlceras en la suela de la pezuña, crecimiento disparejo del casco y formación de surcos o anillos horizontales en la muralla y aún pérdida del estuche córneo.
La laminitis secundaria es poco frecuente, se la puede observar cuando los animales caminan sobre superficies ásperas y secas o se mantienen por mucho tiempo sobre pisos duros esperando el momento del ordeño -se recomienda que en los grandes hatos lecheros las vacas se repartan en grupos a la entrada de la sala de ordeño- para evitar que aquellas permanezcan largo tiempo sobre superficies duras. También se ha observado la podofilitis aséptica en terrenos extremadamente secos, lo cual favorece la aparición de hemorragias y úlceras subsolares, o cuando las vacas tienen que caminar largos trechos al día para llegar a la sala de ordeño.
En otros países se reportan casos de laminitis hereditaria por gen recesivo autosomal en terneras de raza Jersey y Holstein-Frisian.
DEFINICIÓN
La laminitis es un trastorno circulatorio de la lámina o corion digital que se localiza entre la tercera falange y la muralla de la pezuña de los bovinos. Puede afectar tanto un dígito, como todos. Su aparición puede ser aguda, muy dolorosa, la cual es por lo general esporádica, mientras que la presentación subclínica o también llamada crónica es la más frecuente. De persistir el proceso crónico se afectan tejidos adyacentes con deformación y presentación de surcos horizontales en la muralla de la pezuña. Su diagnóstico clínico se centra en el podófilo (fuerte dolor a la palpación de la tapa del casco). De persistir por más de tres (3) o cuatro (4) meses el citado trastorno, aparecerán úlceras en la planta de la pezuña, lo cual complicará aún más el cuadro por invasión de gérmenes, los que infectarán el pododermo. El trastorno se origina aproximadamente 60 días antes del parto – período transicional- (véase en Referencias para consultorios MV, edición 6a, Abril/2003), aún cuando los síntomas aparecen entre los 60 a 100 días posparto.
SUSCEPTIBILIDAD
Las vacas que se encuentran dentro de los primeros 100 días de parto son las más susceptibles de sufrir laminitis subclínica o crónica, debido a que demuestran frecuentes episodios de acidosis ruminal subclínica, ARSA (véase en Referencias para consultorios MV, edición 10a, Octubre/2004). La reducción del pH ruminal a menos de 5.5 cursa con acidosis ruminal, tan frecuente en los hatos lecheros de clima frío, lo que conlleva muerte microbiana en el rumen con producción de endotoxinas, las que a su vez favorecen la liberación de histamina, afectandose las arteriolas del corion germinativo, como su nutrición. Recordemos que los hatos lecheros grandes tienen más problemas podales que los medianos y/o pequeños; del mismo modo las vacas de elevada producción tienen más riesgo de sufrir cojeras de diferente origen. Igualmente son más susceptibles las vacas en estabulación y que reciben dietas ricas en almidones frente a aquellas de pastoreo permanente. Las vacas que han sufrido de laminitis en alguna ocasión tienden a un desordenado crecimiento de las pezuñas, lo mismo que aquellas estabuladas de forma permanente.
CARACTERÍSTICAS
La laminitis se caracteriza por edema (doloroso por cierto), hemorragias en el podófilo que logran traslucirse en la suela de la pezuña afectada y degenerar en úlceras de la suela y en casos avanzados muerte del corion con caída del casco. La alteración de la lámina del dígito enfermo afecta la producción de queratocitos, lo cual se traduce en alargamiento de la pezuña con apoyo en el talón y formación de surcos en la tapa del casco. En casos avanzados las úlceras formadas permiten la entrada de gérmenes por la línea blanca contaminando el corion laminar, el cual desarrolla una pododermatitis séptica supremamente dolorosa, afectando la movilidad del paciente. Generalmente se afecta el dígito lateral externo del tren posterior y el interno del tren anterior. Pequeñas úlceras en la suela suelen desaparecer al final de la lactancia. La deformidad de la pezuña es característica, aunque puede recuperarse al hacerse recorte del dígito afectado. Son frecuentes los relapsos en el siguiente parto.
ETIOLOGÍA
Las causas de la laminitis en el bovino pueden ser de origen multifactorial, pero como se verá más adelante ellas asientan básicamente en un trastorno metabólicodigestivo más que en otras causas, lo cual no excluye necesariamente otra etiología. Veamos:
- ♦ Ya por los años finales del siglo XIX los veterinarios franceses Cadiot, P. J. y J. Almy (1898) de la escuela veterinaria de Alfort, sospecharon que la enfermedad conocida como “Fourbure” (actualmente denominada laminitis), tenía clara relación con una rica alimentación a base de harinas suministrada al hato lechero, como a los bovinos destinados a ceba. ¡Y tuvieron razón!.
- ♦ Actualmente se acepta que la nutrición es el más importante factor de riesgo asociado a la podofilitis aséptica del bovino. Así que la aparición de la laminitis comienza con alteraciones en la función fisiológica del rumen, lo que da por resultado descenso en el pH de aquel, lo que conocemos como Acidosis Ruminal Subclínica (ARSA), lo que conlleva la producción de agentes tóxicos como la formación de ácido láctico, histamina y diferentes endotoxinas, que al llegar a la circulación sensibilizan necesariamente al podófilo, alterando su microvascularización.
- ♦ Altos niveles de carbohidratos fácilmente fermentables en el rumen provocan un incremento de Streptococcus bovis y Streptococcus lactobacillus spp, los cuales son en gran manera responsables de
Acidosis Ruminal Subclínica (ARSA) o clínica (indigestión gaseosa del rumen). De este modo el ambiente interno de la panza se hace desfavorable para los microorganismos gram-negativos, los cuales liberan endotoxinas vasoactivas a medida que mueren. Se presenta rumenitis asociada al ARSA. En los estados iniciales de la acidosis subclínica ruminal se encuentran altas concentraciones de histamina que afectan al podófilo alterando su microcirculación.
ARTICULO COMPLETO PODODERMATITIS DIFUSA ASEPTICA DEL BOVINO (LAMINITIS)