INFLUENCIA DE LA GRASA DE LA DIETA EN LA MICROBIOTA RUMINAL. PARTE I

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LA GRASA DE LA DIETA EN LA MICROBIOTA RUMINAL

En los rumiantes, la mayoría de los procesos digestivos, especialmente la fermentación de carbohidratos y la degradación de las proteínas de la dieta, se deben a la microbiota ruminal: bacterias, protozoos, hongos y arqueas.

Fernando Bacha Baz1 & Maria Jesús Villamide Díaz2 1 NACOOP, 2 ETSIAAB Universidad Politécnica de Madrid

Esta microbiota simbiótica proporciona nutrientes al hospedador, especialmente ácidos grasos volátiles (AGV), proteína microbiana y vitaminas, aunque también se producen pérdidas de energía debido a la producción de metano.

A pesar de la alta estabilidad ruminal por su constancia funcional y la resiliencia del ecosistema microbiano (Weimer et al, 2015), la microbiota ruminal presenta grandes variaciones individuales (Jami y Mizrahi 2012) y puede verse alterada por cambios dietéticos abruptos o importantes, por ejemplo del contenido en almidón o grasa.

Los suplementos grasos se empezaron a usar para aumentar los valores energéticos de las dietas y cubrir las necesidades energéticas en las vacas lecheras o el ganado de engorde en sistemas intensivos, pero también se pueden utilizar para modificar el perfil de ácidos grasos (AG) de la carne (Wood et al., 2008) o de la leche, modulando sus propiedades dietéticas, organolépticas y tecnológicas.

En la mayoría de las dietas de rumiantes, la grasa representa menos del 5% de la materia seca total siendo las semillas oleaginosas – semillas de lino, colza, soja y girasol – la principal vía de inclusión de grasa en las dietas. Estas semillas son ricas en ácidos grasos insaturados (AGI).

  • Ácido oleico (AOL, cis-9-C18: 1)
  • Ácido linoleico (AL)
  • Ácido alfa-linolénico (ALA)

1er paso. Lipolisis El primer paso del metabolismo ruminal de los acilgliceroles es la lipolisis, que da como resultado la liberación de los AG.

La adición de grasa a la dieta puede:

+ Modular la función del rumen, disminuyendo las emisiones de metano (Martin et al., 2016)

– Disminuir la ingesta y del contenido de grasa en la leche (Rabiee et al., 2012)

Un límite para la suplementación con grasas de las dietas de rumiantes es su efecto negativo sobre la degradabilidad ruminal, especialmente cuando tienen un alto contenido en AGI (Brooks et al., 1954).

En este trabajo vamos a centrarnos en la influencia de la grasa sobre la microbiota ruminal.

La mayoría de los AG de la dieta son ésteres de glicéridos:

TRIACILGLICEROLES, principalmente, en concentrados

GALACTOLÍPIDOS Y FOSFOLÍPIDOS en el forraje, excepto en los ensilados en los que las lipasas vegetales liberan los ácidos grasos.

Lipolisis: acción de las lipasas sobre los enlaces éster que unen los ácidos grasos y los alcoholes que al ser hidrolizados liberan los ácidos grasos al medio (Esquema 1). Este proceso se lleva a cabo por las lipasas microbianas, aunque existe cierta actividad lipolítica en el propio material del vegetal.