MANEJO DE LA VACA EN EL PERIPARTO
Sabemos que el intervalo entre partos es un indicador que debe ser cuidado para no perder plata, que se escabulle con la menor producción de leche por vaca por año y menor reposición anual. Para lograr un intervalo de 12 a 13 meses es esencial, entre otras cosas, que la vaca tenga
Med. Vet. Luis Barletta
una involución rápida de su útero para que pueda volver a gestar una nueva cría y por otro lado que restablezca su ciclo y tenga celos fértiles.
Si bien hay varios factores que influyen sobre este período, el manejo de la vaca en el periparto, que es el período de tiempo que va de 3-4 semanas antes a 3-4 semanas después del parto, es vital para llegar a tener el 90% del rodeo preñado antes de los 120 post-parto. En este artículo trataré algunos aspectos del manejo de la vaca en el periparto y dejaré de lado, la no menos importante, tarea de capacitación del personal en la detección de celo, inseminación artificial y el estrés calórico.
Para lograr el objetivo de un intervalo parto- concepción adecuado sería bueno caracterizar algunos cambios fisiológicos que ocurren durante el periparto para luego entender las herramientas que usaremos para mejorar esta situación:
♦ En este período se produce una disminución de la ingesta: causada por cambios hormonales y por el estrés físico y “psíquico” por el cambio de grupo social, hábitos, dolores, etc.
♦ En los últimos 60 días de la gestación hay un aumento de la demanda de nutrientes, principalmente aminoácidos, glucosa y lactato, porque el feto crece el 60 % del peso con el cual nace. En este período necesita producir calostro y si es una vaquillona también necesita energía y proteína para su desarrollo.
Por otro lado en el comienzo de la lactación los requerimientos para producir leche también son altos, llegando al punto más alto en el pico de su lactancia, y si a esto le sumamos que la ingesta está disminuida es fácil vislumbrar que están entrando menos nutrientes de los que son requeridos por el organismo y es por ello que la vaca entra en un balance energético negativo.
La extensión del período de balance energético negativo postparto es uno de los mejores indicadores de cuándo la vaca volverá a la función normal del ovario. Según Buttler y Smith la ovulación ocurre aproximadamente 10 días después de alcanzar el pico negativo del balance energético.
♦ Hay una disminución de la inmunidad, por eso hay mayor predisposición a mastitis y gastroenteritis
parasitarias que pueden disminuir aún más la ingesta de lo que normalmente lo está en esta etapa. Con respecto a la mastitis los cambios son una disminución en el número de linfocitos B y T en la glándula mamaria durante el periparto, como también esta disminuida su acción bactericida y de realizar la extravasación. Walsh y compañía encontraron que tratando a las vacas contra los parásitos en este período, el intervalo parto-concepción disminuía en promedio 4,8 días con respecto a las no tratadas.
♦ Es una etapa en la cual aumenta la incidencia de enfermedades metabólicas como la hipocalcemia, la cetosis, el hígado graso, la metritis y el desplazamiento de abomaso(DA). Todas estas enfermedades están interrelacionadas en algún punto y es por eso que la aparición de alguna de ellas aumenta la probabilidad de aparición de otra,. por ejemplo las vacas que sufren hipocalcemia al parto tienen 6,5 veces más probabilidad de tener distocia, 3,2 veces más probabilidad de sufrir retención de placenta, y 3,4 veces más probabilidad de padecer desplazamiento abomasal.
Estas enfermedades provocan infinidad de pérdidas que se pueden evaluar por la muerte de algunos animales, menor producción de leche, etc., pero en cuanto a la reproducción podemos mencionar algunos efectos que producen estas enfermedades cuando se presentan; en la hipocalcemia se ha establecido una menor involución del útero con respecto a vacas que no presentaron la enfermedad, la cual se la atribuyó a un balance negativo más severo; por otro lado en otro estudio el 1° folículo ovulatorio fue más pequeño. De la misma manera, está probado que las vacas que presentan hipocalcemia tienen una mayor pérdida de condición corporal que vacas sanas.
El estrés que produce la hipocalcemia y la laminitis puede aumentar en 14 días el intervalo parto-concepción y aumentar en 0,5 la cantidad de dosis seminales requeridas para preñar una vaca.
ARTICULO COMPLETO MANEJO DE LA VACA EN EL PERIPARTO